Desde hace tiempo que deseaba una súper máquina amasadora como las que últimamente se ven tanto en los programas de cocina y mira tu por donde, que me han regalado una. Pues bien, después de tanto desearla me entraron remordimientos por haber inducido a mi familia a regalarme algo tan caro sin saber si le voy a sacar partido, además ya me había decidido a comprar una panificadora. Total que después de darle muchas vueltas he decidido que, ¡Qué demonios¡, me la quedo. Un regalo es un regalo... y por muy poco que la vaya a usar, las cosas buenas se disfrutan mucho más.
Así qué he sustituido mi batidora por una kenwood kmix.
Lo que me ha impulsado a crear este blog es que me permite tener una ocupación y sacarle mayor partido a este maravilloso regalo. Me he propuesto cocinar algún dulce al menos una vez por semana y compartir mi experiencia con todo aquel que quiera seguirme.
Me despido hasta el próximo post en el que contaré el gran estreno.
Os deseo dulces pensamientos.
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